En varias entregas iré mostrando lo que he llamado la radiografía de las empresas de España. En esta primera entrega podemos ver el número de empresas en España según su tamaño, la evolución que ha tenido desde una situación económica favorable (2005) a la galopante crisis que hoy día existe y que estará más de lo que deseamos y se pensaba en un principio
El primer dato a destacar es el grandísimo porcentaje de microemrpesas y pequeñas empresas que existe ante un casi inexistente porcentaje de medianas y grandes empresas. Es decir, hablamos que un 99,84% se tratan de las tan famosas pequeñas y medianas empresas (Pymes). Este dato nos indica claramente el dominio apabullante de este tipo de empresas.
Otro aspecto a ver es la variación que ha existido en estos 4 años y con la crisis de por medio. Se puede comprobar como han bajado todas las categorías de empresas en beneficio de las microempresas.
Reflexionando un poco sobre estos datos:
Es sabido que ante un contexto económico desfavorable, las empresas más afectada y las primeras en caer son las Pymes debido a su poca capacidad de endeudamiento frente a los bancos, problemas de tesorería y escasez de patriomio para responder ante sus deberes y obligaciones. Por tanto, ante una crisis, aparte de que como hemos dicho las pymes serán las primeras en verse afectadas, según lo que nos vislumbran los datos, el tejido empresarial del país se verá altamente damnificado. Además, debido a este alto porcentaje, gran parte del empleo proviene de éstas empresas por lo que la tasa de paro se ve igualmente afectada. No nos engañemos, el motor de un país no son las 4 emrpesas grandes que existan en él (está claro que ayudan y mucho a generar riquea), el verdadero motor de un país se encuentra en ese 99% de pequeñas y medianas empresas. Si a éstas no les va bien, dificilmente le irá bien al país.
Todo está relacionado, todo en economía es un engranaje perfectamente coordinado. Si las pymes se ven afectadas por una bajada de ventas y/o beneficios, habrá recortes de personal ( recuerden gran parte de los trabajadores provienen de estas empresas), que al estar parados no estén cotizando y haya que pagarles, por lo que el estado de bienestar y con ello las pensiones y la sanidad empiecen a tambalearse.Esto provoca que la gente consuma menos (desciende la demanda interna), se endeudan la familias más, disminuya la confianza en los mercados, en definitiva, cae gran parte del poder adquisitio del país, de su indicador económico el PIB.
Ante tan fáciles conclusiones, sigo sin entender el poco apoyo del gobierno a estas empresas. La política de dar el dinero a los bancos para que ellos lo repartan sin condiciones ha provocado lo que todos sabíamos: Se ha seguido con el grifo cerrado por parte de la banca para la financiacón a las pymes y les ha servido para tapar sus agujeros y sus excesos en el pasado. Ahora esa reserva ya no está y la situación sigue igual. No hubiera estado de más haber destinado parte de ese dinero a estas empresas,o a darlo a los bancos pero con unas condiciones muy claras de acceso al crédito a las pymes. Que no cumplen, no hay dinero , así de fácil y así ha sido en EEUU.
